Familiares de un bebé que falleció en el vientre de su madre, denunciaron que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Saltillo, Coahuila les entregó el cuerpo con mutilaciones.
La bisabuela del niño, Juanita Sánchez Reyna, dijo que los médicos se negaron a darles explicaciones sobre los cortes que el niño tenía en los genitales y en un glúteo.
La mujer declaró al diario Zócalo que el bebé murió en el vientre de su madre, de tan sólo 16 años, debido a la supuesta falta de atención médica en la Clínica 1 del IMSS.
La afectada indicó a ese medio que al entregarles el cadáver, las autoridades de la Clínica les aconsejaron que no velaran al menor y lo sepultaran de inmediato, pues para eso se había preparado el cuerpo.
Sin embargo, luego de que la familia del bebé decidió sepultarlo, se percataron de que al niño le habían cortado un pedazo de un glúteo y sus genitales.
Además, los afectados denunciaron que el Instituto tardó varias horas en hacerles la entrega del cuerpo.
Sánchez Reyna explicó que llevaron el cuerpo a una funeraria del DIF y que el haber visto el cuerpo con mutilaciones les causó un gran impacto emocional.
La bisabuela del menor afirmó que debió recurrir a sus ahorros para poder enterrar al niño, en tanto que la familia del padre se encargó de adquirir un terreno en el panteón municipal pues el joven se encuentra sin empleo.
El pasado día 16, Sánchez Reyna denunció públicamente a los médicos del IMSS que atendieron a su nieta, ya que afirma que la regresaron a su casa cuando tenía contracciones. Sin embargo, cuando los dolores aumentaron y volvió a la clínica, el producto ya había muerto.
Hasta el momento, el IMSS no da dado a conocer su versión sobre estos hechos.
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