El expresidente Enrique Peña Nieto es investigado por las autoridades de Estados Unidos por el presunto soborno en la compra venta de Fertinal, realizada por Petróleos Mexicanos (Pemex) en 2015.
De acuerdo con las leyes de la Unión Americana, el Departamento de Justicia de ese país, la Securities and Exchange Comisiión (SEC por sus siglas en inglés), la Comisión de Bolsa de Valores de Estados Unidos y la agencia del gobierno de esa nación, Peña Nieto recibió un soborno para “autorizar” la compra de la empresa privada con un sobreprecio que dañó el patrimonio de Pemex y el erario de México.
Lo anterior sucedió para que el ex director de Pemex, Emilio Lozoya Austin, pagará 635 millones de dólares por Fertinal, “cuando esta empresa era efectivamente insolvente, con cientos de millones de dólares en deuda”.
Al respecto, las consultoras PricewaterhouseCoopers (PwC) y Binder Dijiker Otte (BDO), además de la Auditoría Superior de la Federación habían advertido que Fertinal estaba en quiebra, ya que tenía una deuda bancaria de 264 millones de dólares y solo disponía de 12 mil dólares de efectivo en cajas.
No obstante, lo anterior no les pareció importante y Lozoya Austin habría recibido autorización de Peña Nieto para adquirirla y entregar a Fertinal 51 millones de dólares para un reparto de dividendos antes de la operación compra-venta.