De pie frente a la Iglesia Bautista en Knoxville, Tennessee, el pastor Grayson Fritts tuvo la atención de su congregación. Era el 2 de junio, el primer domingo del mes del orgullo gay, y Fritts había planeado un sermón oportuno.
Durante aproximadamente una hora, Fritts, que también es detective de la Oficina del Sheriff del Condado de Knox, criticó a los miembros de la comunidad LGBT+, refiriéndose a ellos como “sodomitas”, “monstruos” y “animales”, y llamó al gobierno. Para llevar a cabo el castigo adecuado para el “delito capital”.
“Son dignos de morir”
“Son dignos de morir”, declaró en un video publicado originalmente por la iglesia que luego se compartió en las redes sociales.
Fritts argumentó que la Biblia exige que los homosexuales sean condenados a muerte. Y a lo largo del sermón, habló de cómo es responsabilidad del gobierno hacer cumplir esas supuestas enseñanzas.
La fiscalía ya investiga a Fritts
El sermón provocó una condena feroz por parte de funcionarios, público en general y organizaciones en defensa de la comunidad LGBT+.
El fiscal general de distrito del condado de Knox, Charme Allen, anunció que su oficina revisará todos los casos pendientes relacionados con Fritts, que pasó 30 años como detective.
En una declaración a The Washington Post, Allen agregó que aunque nadie ha hecho ninguna denuncia contra Fritts, también se asignará un fiscal para recibir quejas sobre sus casos anteriores.
🚨NEW VIDEO: @knoxsheriff‘s Detective Grayson Fritts – also a pastor – calls for the government to arrest and EXECUTE LGBTQ People.
He’s on paid sick leave until July 19, and no longer on active duty. As reported by @knoxnews.pic.twitter.com/lBYLhG1ynx
— The Tennessee Holler (@TheTNHoller) 12 de junio de 2019
Knox County detective Grayson Fritts has been relieved of duties following video surfacing of him calling for the death of LGBTQ.pic.twitter.com/NmFmF4UXMr
— Travis Akers (@travisakers) 15 de junio de 2019
FFRF is calling on the Knox County Sheriff’s Office to investigate Deputy Grayson Fritts, who called for the government, and specifically law enforcement, to arrest and kill all LGBTQ people. Our government does not exist to enforce *any* god’s law, especially one so hateful. pic.twitter.com/bxodkxz2BN
— Andrew L. Seidel (@AndrewLSeidel) 14 de junio de 2019