Con el auge del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en la escena del tráfico de drogas en México, los líderes del grupo criminal comenzaron a ampliar sus estrategias delictivas y optaron por reclutar mujeres para laborar como sicarias.
Una de las primeras en laborar fue Rosalina Carrillo Ochoa, La Estrella, quien se encargó de una célula en la región Valles, de Jalisco.
Al parecer la cabeza del CJNG fue famosa por sus acciones sanguinarias y por no tentarse el corazón al momento de realizar venganzas.
Rosalinda Carrillo Ochoa, arrestada el 1 de noviembre de 2012 y señalada como la lideresa del Cártel de Jalisco Nueva Generación en la región Valles en Jalisco; fue sentenciada a 15 años de prisión y a pagar una multa de 15 mil 715 pesos con 28 centavos.
Su sentencia fue dictada en 2018; no obstante, su condena fue aplazada debido a que un tribunal federal ordenó “la reposición del procedimiento”.
En su detención fue también arrestado Victoriano Torres, quien era su guardaespaldas. Asimismo, fueron aseguradas armas de fuego de diferente tipo de medidas y calibres; cartuchos, cargadores; 43 gramos de metanfetamina y una bolsa con 38 gramos de cocaína para su venta.
A Torres aún le resta cumplir una pena de nueve años con seis meses de cárcel; así como una multa de 8 mil 862 pesos.
Tras la sentencia, “La Estrella” fue trasladada al Centro de Reinserción Social Estatal Femenil Número 2 de Ciudad Juárez, Chihuahua.
Victoriano Torres fue enviado al Centro Federal de Readaptación Social Número 2, de puente Grande, Jalisco.
“La Estrella” también está vinculada con el homicidio el 30 de octubre de 2012, del director de Seguridad Pública de San Martín Hidalgo.